Para que un objeto en tres dimensiones sea realista, debe tener una apariencia trabajada. Por ejemplo, las vetas de madera de una mesa o el pelaje de un felino. Hablamos de texturizar modelos 3D, una técnica frecuentemente usada en el cine, la televisión y el mundo gamer. Para llevarla a cabo, los/as especialistas suelen tomar algún Curso de Creación y Modelado de Personajes 3D para Videojuegos o productos audiovisuales, aunque puedes empezar a practicar con texturas en cualquier momento. ¡Échale un vistazo a esta guía y empieza ahora!

Principios básicos de la texturización 3D

Texturizar modelos 3D es “darles vida” con colores, opacidades, brillos y otras variaciones en su superficie. Se trata de pasar de capas simples y uniformes —como las que se podrían pintar con un selector de relleno en Paint—, a otras que imiten la realidad o cuenten una historia.

Las texturas también tienen en cuenta aspectos como la suavidad o la rugosidad de un elemento, los reflejos que produce y, por supuesto, el “material” que lo compone. Se aplica tanto en el modelado orgánico 3D como en el modelado hard surface, y constituye una profesión en sí misma.

Dicho de forma simple: texturizar modelos 3D es añadirle detalles a un objeto tridimensional. El proceso tiene cuatro etapas, que van desde la elaboración de las texturas hasta el pulido del proyecto:

  • Confección de texturas: lo primero es crear la textura que vas a aplicarle al objeto o personaje. Como veremos más adelante, puedes hacerlo tú mismo/a o dejar que se encarguen los programas de diseño 3D.
  • Aplicación del diseño: cuando tenemos la capa con la que vamos a texturizar nuestros modelos 3D, hay que aplicarla. Lo que suele hacerse es mapear el elemento en cuestión para que cada detalle se visualice en la zona correcta.
  • Luces y sombras: es el momento de llevar la iluminación a escena. Determina los puntos de los que procede y define cómo incide la luz en los objetos que estás texturizando.
  • Ultimación de los detalles: puedes pintar directamente sobre los modelos 3D para texturizar los últimos detalles o añadir pequeñas rugosidades o abolladuras que le den más realismo.

Herramientas y software recomendado para texturizar

Hay multitud de programas con los que puedes texturizar tus modelos 3D. Algunos ofrecen funciones más avanzadas que otras, pero la curva de aprendizaje no suele ser demasiado pronunciada.

Uno de los que más se están popularizando últimamente es el Substance 3D Painter de Adobe, que incorpora herramientas inteligentes y te permite visualizar los cambios en tiempo real. Pero en el mercado hay otros ya muy consolidados, como Zbrush y Blender 2.8x, ideal para el modelado y texturizado enfocado a videojuegos. ¡Descubre las características de cada uno!

Substance 3D Painter

La plataforma de Adobe ofrece instrumentos muy interesantes para que texturizar modelos 3D sea más sencillo. Con ella, es posible crear toda clase de estilos diferentes y transformar los trazos en cualquier momento sin perder las modificaciones que hayas hecho antes.

Otra ventaja son sus máscaras inteligentes, su biblioteca de texturas y la opción de personalizar las exportaciones. Puedes hacer todos los tipos de modelado 3D que se te ocurran y replicar en ellos el comportamiento que los materiales tienen en la vida real.

Blender

Este software de diseño puede generar texturas directamente, sin necesidad de que tengas que crearlas o importarlas. Además, es compatible con multitud de motores de renderizado y cuenta con sofisticados instrumentos para el mapeo de las texturas 2D.

A diferencia del programa de Adobe, la descarga de Blender es gratuita. Si te animas a texturizar modelos 3D con él, te invitamos a explorar su completo sistema de nodos de textura y a conocer a su amplia comunidad de usuarios/as.

Zbrush

La última de las herramientas que recomendamos para texturizar modelos 3D es Zbrush. Se trata de un software específicamente enfocado en la escultura y la pintura digital, con el que podrás introducir detalles en tus objetos con una precisión milimétrica.

Gracias a las últimas mejoras que ha incorporado, los/as diseñadores/as pueden controlar de forma dinámica los bordes de los elementos y realizar ajustes en áreas enmascaradas. Si te lo propones, tienes la opción de esculpir directamente los objetos como lo harías con arcilla en la vida real. ¡Pruébalo y optimiza tus animaciones!

Técnicas avanzadas de texturización

Cada software de diseño tiene sus especificidades técnicas. Sin embargo, en todos ellos suele haber tres formas de texturizar modelos 3D:

  • Usar imágenes reales: ¿te gustaría llevar una textura del mundo real a tu modelo en tres dimensiones? Pues no tienes por qué esforzarte en imitarla. Es tan simple como sacarle una fotografía e importarla en tu software de edición. Una vez en él, tienes la posibilidad de realizar modificaciones o de emplear la IA para convertirlo en una textura generada por ordenador.
  • Texturizarlo todo tú mismo/a: si quieres un control absoluto de todas las fases del proceso, te aconsejamos que pruebes a elaborar tú mismo/a los materiales a partir de figuras primitivas.
  • Recurrir a las bibliotecas de materiales: es raro hoy en día el programa para animadores/as que no tenga un repositorio de texturas. Puedes aplicar unas sobre otras y realizar las modificaciones pertinentes hasta conseguir el resultado que estabas buscando.

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Bibliografía