Hablar a día de hoy de sistema operativo de un smartphone es sinónimo de Android o iOS. En cambio, su llegada al mercado es reciente. Era enero de 2007 cuando Apple revolucionó la tecnología móvil presentando su primer iPhone. A finales de ese mismo año Google le dio la respuesta con el nacimiento de Android.

Pero antes de estos sistemas operativos, los protagonistas del mercado móvil eran Symbian, Window Mobile y Blackberry. ¿Recuerdas cómo eran? Te refrescamos la memoria.

 

¿Cómo era tu móvil hace diez años?

El fabricante estrella hace diez años era Nokia y su sistema operativo por aquel entonces era Symbiam. En su escritorio podían verse todas las aplicaciones, tenía un GPS funcional y una multitarea real con la que se podía pasar fácilmente de una app a otra. El mundo táctil todavía no había llegado y había que utilizar el teclado para moverse por el escritorio.

Aunque ahora Symbian sea ya una cosa del pasado a él pertenecen grandes descubrimientos, como la aplicación de mando a distancia IrRemote que usaba el puerto infrarrojos de los terminales, el reproductor de música PowerMP3 y el de vídeo CorePlayer o el estreno de la multitarea real, permitiendo ejecutar varias aplicaciones a la vez en el móvil.

Hace diez años Microsoft también estaba haciéndose un hueco en el mundo smartphone. Trataba de generar en el móvil una experiencia similar a la que podías tener en un ordenador de sobremesa. Incluía aplicaciones clásicas como Windows Media Player o Messenger y tenía soporte para AJAX, JavaScript y XMLDOM en Internet Explorer. Se manejaba de manera táctil, pero con un stylus.

Si la idea de Microsoft fue llevar el ordenador en tu móvil, la de Blackberry era tener la oficina en tu bolsillo. Por ello, los móviles contaban con un teclado amplio que permitía escribir textos de forma rápida y cómoda. No apostó por ser táctil, sino por una interfaz con la que moverte de arriba abajo y de izquierda a derecha en los menús.

Ante la llegada de Android e iOS, Blackberry vivió una de sus épocas doradas con el lanzamiento de su modelo Bold. Este fue, quizás, su momento final de gloria. Desde entonces la llegada de los gigantes actuales del mercado han dejado poco margen de competencia a otros sistemas operativos.

De hecho, en 2016 BlackBerry anunció que dejaba de fabricar sus propios dispositivos. De manera similar, Microsoft comunicó el pasado año que su sistema operativo no recibiría mejoras en el futuro, sino que simplemente se encargaría de subsanar fallos y actualizar su seguridad para respaldar a sus clientes.

A los programadores móviles de Android e iOS aún les queda un largo camino por delante, pero al ritmo al que avanza la tecnología te has llegado a preguntar… ¿cómo serán los sistemas operativos del futuro?