¿Podría ser 2021 el año en que la realidad virtual explote de forma definitiva? Esto es lo que algunos expertos apuntan respecto a esta tecnología tras el lanzamiento de las gafas de realidad virtual Oculus Quest 2, que vieron como superaron las ventas esperadas, quizás debido a la situación generada por la crisis actual. En este sentido, una de las aplicaciones de este tipo de sistemas es el arte virtual.

Los museos llevan ya un tiempo intentando pivotar hacia lo digital, sin embargo, no ha sido hasta 2020, motivados por la pandemia, cuando realmente han tenido que dar el siguiente paso y dar el salto total hacia el uso de nuevas tecnologías para poder mantener sus exposiciones abiertas, aunque solo fuese de forma virtual.

Una situación propicia para que cada vez crezca más este ámbito de aplicación para la realidad virtual. Algo que la convierte en una herramienta altamente demandada y para la que aprender a programar puede resultar fundamental en el futuro.

 

¿Qué significa la realidad virtual para los museos?

Los museos tienen como objetivo dar vida a las colecciones y la realidad virtual es una herramienta excelente para ello. Ofrece una experiencia diferente: la de la inmersión total en una exhibición. Muchos museos de todo el mundo ya están aprovechando su potencial.

En pocas palabras, la realidad virtual coloca al usuario dentro de una experiencia. Puede ser interactivo o tomar simplemente la forma de un video de 360 grados. La realidad virtual se está utilizando para crear recorridos por museos, hacer que las exhibiciones sean interactivas y dar vida a los distintos escenarios que se manejan en ellas. Se trata de una tecnología que puede ayudar a los conservadores de museos y galerías a poner los objetos en contexto y mostrar su verdadera escala.

Uno de los factores más limitantes actualmente son los costes de producción y de los propios equipos y sistemas de RV. No obstante, con el paso del tiempo, este tipo de equipos se irán abaratando y serán de uso mucho más frecuente. 

En definitiva, gracias al uso de la realidad virtual, el arte tradicional se convierte en arte virtual. A continuación, vamos a ver algunos ejemplos de cómo los museos han acogido el auge de la realidad virtual. Estas instituciones han utilizado la tecnología para darle una dimensión adicional a sus colecciones.

 

Museo del Louvre

En octubre de 2019, el Louvre de París lanzó Mona Lisa: Beyond the Glass, una experiencia de realidad virtual que explora la pintura del Renacimiento como parte de su exhibición de Leonardo da Vinci.

A través del diseño interactivo, el sonido y las imágenes animadas, los usuarios podían descubrir detalles sobre la pintura, como la textura del panel de madera y cómo el paso del tiempo ha cambiado su apariencia.

Se trata de una experiencia de arte virtual que se puede disfrutar como parte del recorrido por el museo o descargado la aplicación para Android y iOS si cuentas con dispositivos con soporte para RV.

 

Museo de Historia Natural de Londres

En 2018, el Museo de Historia Natural, en asociación con la emisora Sky, desarrolló Hold the World, una experiencia educativa de realidad virtual que permite encontrarse cara a cara con David Attenborough.

Esta experiencia interactiva de arte virtual te lleva al Museo de Historia Natural de Londres y te pone al alcance de algunos especímenes raros de su colección, permitiendo que manipules y cambies el tamaño de los objetos mientras Attenborough te explica los datos más importantes sobre cómo podrían haber vivido estos animales.

 

Museo del Prado

Durante el 2020, al igual que muchos otros museos, el Museo del Prado de Madrid, ofreció una experiencia de arte virtual con la que poder ver sus distintas salas y exposiciones.

En este caso, se trata más bien de un recorrido virtual a través de vídeos de 360º que van acompañados de sonido y explicaciones sobre lo que estamos viendo. Una experiencia que se parece a las de realidad virtual, pero más accesible para todo el público, ya que se puede hacer desde el navegador web.

 

The Grand Museum VR

The Grand Museum VR es un juego diseñado y creado en realidad virtual para el sistema de Sony VR, Oculus y Steam y que puedes encontrar en varias plataformas. Se trata de un entorno virtual que recrea un museo ficticio en el que podemos acercarnos a más de 80 obras de arte antiguas. Una forma de arte virtual que nos lleva en un viaje por muchas de las culturas antiguas de Europa, Asia y África del Norte.

Las reliquias antiguas, las reales, las que se encuentran en exhibición en los grandes museos de todo el mundo, fueron escaneadas para después ser trasladadas a este juego virtual.

 

El futuro de los museos y el arte virtual

El Museo Kremer ha ido más allá de los ejemplos que hemos recorrido, siguiendo un poco la estela de Grand Museum VR, solo que en este caso no es un juego, sino que se trata de un museo, pero uno que no existe en absoluto como entidad física. En su exposición nos presenta a más de 70 antiguos maestros holandeses y flamencos del siglo XVII que solo están disponibles a través de una experiencia de arte virtual y no existen juntos como una colección física.

Proyectos como este contribuyen en gran medida a hacer más accesible la experiencia del museo moderno. Por ejemplo, pueden ayudar a las personas con problemas de movilidad a disfrutar de las exposiciones desde la comodidad de sus hogares.

En este sentido, la realidad virtual puede transportar a los visitantes a colecciones ubicadas en el otro lado del mundo, sin tener que poner un pie en un avión. ¿Implica esto que los museos y galerías de arte van a tomar este camino? En absoluto, porque, en todo caso, la realidad virtual solo es un complemento, el arte virtual solo es una nueva forma de acercar y dar vida a las colecciones.

 

¡Trabaja con realidad virtual! ¡Conviértete en programador!

Ahora ya conoces algunos ejemplos sobre arte virtual, exposiciones, museos y galerías que emplean esta nueva tecnología para que podamos visitarlos desde la comodidad de nuestra casa. Una de las muchas aplicaciones que pueden tener los sistemas de realidad virtual.

La realidad virtual se abre camino poco a poco y puede que estemos (o no) cerca de ver su explosión definitiva. Lo que sí es una certeza es que cada vez tiene más aplicaciones y que programar para realidad virtual va a ser una de las profesiones (ya lo es) más demandadas del mercado laboral.

Por este motivo, especializarse con un Curso de Programación de Videojuegos y Realidad Virtual es una excelente idea. Con la formación de Tokio School podrás hacerlo de la mano de expertos y profesionales del sector. Profesores que te guiarán para que te conviertas en el profesional que realmente quieres ser.